Debod: Un templo egipcio en Madrid (Madrid, España)

Vista del Templo al atardecer (Jiuguangw para Flicrk. Creative Commons)
Cuando pensamos cual es el monumento más antiguo de Madrid nos da por pensar en alguna iglesia mudéjar, o tal vez la muralla árabe que se encuentra junto a la Almudena. Pero a pocos se le ocurre pensar que este templo egipcio trasplantado tiene una antigüedad estimada de 2.200 años, aventajando, nada menos que en 900 a los que tiene la misma ciudad. Y es que el templo de Debod no sólo es uno de los monumentos más sorprendentes de Madrid, sino también de todo el planeta. Lo es por una sencilla razón: Es el único, que se sepa, que forma parte del paisaje urbano de una ciudad fuera del Antiguo Egipto. Es un monumento totalmente desubicado, lo que sería un anacronismo si no fuera porque otras ciudades europeas lucen imponentes obeliscos ( a los que dedicaré una entrada algún día) que adornan las plazas de ciudades como  Roma, París, Estambul, etc; esos que fueron fruto de la rapiña de los europeos cuando se puso de moda plantar un obelisco egipcio en el jardín de tu casa.
En el caso de el Templo de Debod, fue un regalo que el presidente Nasser de Egipto hizo a España en el año 1968 en agradecimiento por haber acudido al llamamiento de la Unesco para salvar los templos de Nubia, en especial Abu Simbel, por la crecida de las aguas del Nilo debido a las construcción de la presa de Asuán. Y no sólo a España, sino a los otros países que acudieron a esa llamada. En concreto, Egipto dono los  templos de Dendur a Estados Unidos, Ellesiya a Italia y Taffa a Holanda. Lo que diferencia al de Debod de los otros es su ubicación al aire libre, pues los otros están expuestos en el interior de museos.
En sí se trata de un edificio de la época ptolemaica, muy lejos de la época clásica de los grandes faraones y ya cuando Roma comenzaba a dominar el Mediterraneo. Parece ser que su época más antigua fue construida por el rey nubio Adijalamani de Meroe en el actual Sudán, donde se cree que está enterrado. Las naves laterales del templo se erigieron durante el siguiente periodo del rey Ptolomeo IV Filópator, siendo finalizado en la época romano-imperial (De hecho el emperador Augusto aparece representado presentando ofrendas a los dioses Isis y Osirís). El templo está dedicado al dios Amon y procede de una zona del sur de Egipto, hoy bajo las aguas del Nilo, que se llamaba Ta-Hut, más tarde deformado en "Dabud" o "Debod". En el siglo XIX un terremoto afectó a su estructura y ya sufrió una remodelación por aquel entonces. De su estructura cabe destacar la capilla de Adijalamani o de los relieves y también el llamado Mammisi que en copto significa "lugar de nacimiento" y es donde la diosa Isis daba a luz.

El templo de Debod en su ubicación original (Francis Frith. Dominio Público)


Como dijimos antes, Debod fue un regalo del estado egipcio a España por la ayuda prestada en relación al colosal trabajo relacionado con el  traslado del templo de Abu Simbel a un lugar que estuviera a salvo de ser cubierto por las aguas de la presa de Asuán.  Aparte de este famoso templo nubio otras construcciones quedarían cubiertas por las aguas y uno de ellos sería el de Debod. Por ello, como un juguete de piezas fue desmontado en 1961 y llevado a la isla Elefantina donde las piedras fueron almacenadas hasta el mes de abril de 1970 y de allí navegaron por el Nilo hasta Alejandria en que de nuevo se embarcaron en dirección a Valencia. Desde esta ciudad fueron transportadas por camión hasta Madrid, donde fueron almacenadas en donde antiguamente se ubicaba el Cuartel de la Montaña que fue destruido durante la Guerra Civil.





Reconstruir aquel edificio, parece que no fue cosa fácil, en la que con precarios planos y fotografías de poca fiabilidad, improvisando y reconstruyendo (con piedras traídas de Salamanca   se consiguió reconstruir el edificio. Alguna piedra debió sobrar que no encajaba (¡o vaya usted a saber si era de otro templo.Si uno se da una vuelta por los alrededores, en unos jardines cercanos descubrirá estos sospechosos restos). Alrededor de los pilonos de acceso, se construyó un pequeño estanque para hacer recordar al Nilo que épocas de crecida cubria la construcción. Finalmente el monumento fue inaugurado el 18 de julio de 1972.

Un capitel "sobrante" en los alrededores


La polémica respecto a su conservación ha sido, incluso, más intensa que la de su reconstrucción. Se ha criticado en muchas ocasiones que  un edificio de estas características esté a merced de los elementos meteorológicos, tan diferentes de los de su país de origen; así como el inevitable vandalismo. Se han planteado diversas actuaciones pero el edificio se sigue degradando. De una manera o de otra, no cabe duda de que pocas ciudades del mundo tienen un edificio tan original que forme parte de su trazado urbanístico.
                                           
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El templo de Debod está situado en el madrileño parque del Oeste, no muy lejos de la Plaza de España. La estación de metro más cercana es Ventura rodriguez en la linea 3


               
Vista nocturna del templo (Carlos Delgado. Creative Commons)

                                        
Detalle del templo (Planhard. Creative Commons)
Vista trasera del templo


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